FRACAZO POR ROBAR

   

Érase una vez en un pueblito muy lejano habitaban tres familias las cuales vivían a toda hora peleando por el liderazgo del pueblo las familias eran de apellidos Ortiz, Orosco y la familia lizaraso. La familia Ortiz hacia poco que habían llegado a aquel pueblo pero eran los más groseros y sobretodo muy irrespetuosos ellos se creían los dueños del pueblo, la familia lizaraso era la que más tiempo llevaba en el pueblo y eran los dueños de la única tienda que había en el pueblo, y la familia Orosco era los dueños del restaurante. Estas tres familias eran muy envidiosas peleaban porque a una le iba mejor que a la otra pero un cierto día la familia Ortiz pensó en montar un hotel con restaurante incluido, la familia Orosco fue la primera en enterarse de la noticia, la familia Orosco decidió hablar con los lizaraso, y estas dos familias tomaron la decisión de unirsen para robar el negocio de los Ortiz de manera que ellos no se dieran cuenta de que los iban a robar en su propia cara, planearon hacer las paces para facilitar el robo, y más tarde estas tres familias se reunieron para hablar del negocio y decidieron que la familia Ortiz pusiera todo el dinero para comenzar este proyecto y la familia lizaraso debían ser os administradores del hotel y la familia Orosco del restaurante, la familia Ortiz cumplió con su trato ahora solamente debían esperar unos pocos días para ser robados, así pasaron varios meses hasta que un día las familias que tenían planeado robar decidieron ponerlo en marcha, sin darse cuenta que en todo el lugar habían cámaras y micrófonos escondidos, las familias pensaban dejar en ruina a esa familia. Al día siguiente decidieron iniciar el robo sin pensar que los Ortiz los tenían vigilados. Los Ortiz al ver lo sucedido llamo a la policía, ellos tardaron unos minutos en llegar, las dos familias al escuchar la sirena de la patrulla se pusieron a pelear entre ellos sin pensar en huir, después de unos minutos la policía llego y los capturo los cuales fueron a dar a la cárcel por varios años de condena y así la familia Ortiz vivieron muy tranquilos para siempre por el resto de sus vidas.